14. Atención a la diversidad
Hace unos años
una amiga fue de visita a O Pelouro mientras estudiaba la carrera de infantil. Recuerdo
que vino fascinada de cómo aquellas criaturas celebraban una asamblea cada
mañana para poner en común sus necesidades y proyectos. Estuvo durante tiempo
hablando de los detalles que iba recordando, porque nada era como la escuela
que conocemos: sin distribución por edades, sin segregación por capacidades,
sin aulas tal como las conocemos, Donde el tiempo fluye entre actividades y no
entre asignaturas.
La escuela tiene
algunas particularidades difíciles de encontrar en otros lugares como el
entorno natural, la arquitectura, el número de personas dentro de la comunidad
escolar, La implicación de las familias y del profesorado… Todo hace que sea
difícil de reproducir en el entorno urbano o en institutos con gran cantidad de
estudiantes, pero no significa que no se pueda tomar como referencia.
El trabajo común
de alumnado de diferentes edades permite que cada cual lleve sus ritmos de
aprendizaje sin limitaciones para las/os más avanzados, ni la frustración de no
llegar para quienes necesitan más tiempo. Si bien es cierto que el currículo está
organizado por edades se pueden realizar proyectos en los que intervengan
alumnos y alumnas de diferentes niveles.
La inclusión de
diversidad se hace real cuando la vida diaria transcurre entre personas con
diferentes capacidades, orígenes, contextos familiares… y esto sí se puede
hacer en un instituto al uso evitando la segregación.
Por otra parte, las
actividades por grupos, permiten empatizar, colaborar y aprender de las y los
demás, alejándose un poco de la figura del docente como única fuente de
conocimiento.
El tiempo de
libre disposición dentro de las aulas sirve como entrenamiento de autogestión
mejorando la competencia en la organización y autonomía.
No es cuestión de replicar el sistema, sino de ver lo que funciona y adaptarlo.
"Lectura fácil" hace referencia al método de adaptación de textos a personas con dificultades de comprensión mediante el uso de ciertas pautas sobre maquetación, vocabulario... Además, es el título del libro de Cristina Morales, políticamente incorrecto, macarra, reivindicativo e inconformista que habla de cuatro mujeres con "discapacidad intelectual" reconocida y como se enfrentan a la vida y a la opresión en una sociedad capacitista y burócrata.
Hasta otra lectura.
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